domingo, 23 de agosto de 2009

Culpan sólo a los ciudadanos de la crisis del agua

El Gobierno de la Ciudad quiere cargar la responsabilidad de la crisis del agua, que se vive en el Valle de México, sólo a los capitalinos.
Pero esa postura es muy cómoda y deja de lado la responsabilidad de las autoridades que, durante años, desoyeron la alerta de los especialistas en consumo y gestión del agua de las universidades más importantes del país.

¿Y las inmobiliarias?
Por qué ahora exige a los ciudadanos que cambien su regadera actual por una ahorradora, cuando no hizo una petición similar a las inmobiliarias que construyeron miles de departamentos con esas llaves y esos depósitos que ahora se le pide a los capitalinos cambiar.
A qué porcentaje de vivienda o de desarrollos comerciales o para oficinas se les exigió un sistema de reuso de agua o de captación de agua pluvial. Cuántos de estos edificios incluyeron jardines para que, con el agua de la lluvia, se recarguen los acuíferos de dónde se extrae el 70% del agua que se consume en la ciudad.
Cabe recordar que por cada 60 metros cúbicos que se extraen del subsuelo chilango se filtran 30.

Gestión del agua
Se trata de un problema de gestión del agua de los gobiernos de la Ciudad de México, perredista en los últimos 10 años; y del Estado de México, priista.
Las campañas para ahorrar agua hasta antes de la crisis que vive actualmente la ciudad eran prácticamente nulas, y esta situación ha ido acompañada de un subsidio al consumo del líquido.

Los parques
Todavía hay parques en la Ciudad que se riegan con agua potable. En algunas delegaciones las fuentes también tenían agua potable, como en la delegación Álvaro Obregón, durante la administración de Leticia Robles.

Es un aviso
La Ciudad de México vive el primer gran aviso de lo que puede ser una catástrofe si sus autoridades, junto con los capitalinos no nos cambiamos el chip. La culpa no es sólo de los habitantes, sino también de los gobiernos que con una postura poco responsable detonaron construcción de vivienda y permitieron el desperdicio del agua, sin una visión más amplia y de largo plazo.

Hay otros avisos…
Los hundimientos diferenciales que ya cuestan millones de pesos a la ciudad, y que ya han provocado muertes son una parte de esos avisos.